Reseña: All Of Us Strangers es intrigante desde el inicio #FICM
Adam (Andrew Scott) y Harry (Paul Mescal) viven en un edificio de departamentos de Londres y parecen ser los únicos ahí. Harry se queja del silencio, es insoportable. Harry nota a Adam durante un simulacro y trata de conocerlo más a fondo. Llega a su piso con una botella de alcohol japonés y claras intenciones de ligárselo. Adam también es gay, pero se mantiene inseguro y distante, triste. No obstante, pronto termina invitándolo a pasar, dejando claro que la atracción es mutua.
¿Qué hace a Adam tan distante? Tenemos una idea de ello cuando él viaja fuera de Londres a una casa en un suburbio y pronto se le acerca un hombre (Jamie Bell) que lo saluda con absoluta familiaridad. El hombre lo invita a pasar a su casa a platicar con su esposa (Claire Foy). Los dos lo reciben con calidez y con la intención de ponerse al corriente; claramente se conocen, pero no se han visto en mucho tiempo. Adam les cuenta que ahora es guionista para cine y televisión y ambos lucen orgullosos.
Descubrimos que esta pareja son su padre y su madre. Adam luego dice que ellos murieron en un accidente de coche cuando él tenía doce años.
All Of Us Strangers, es intrigante, pero con un tono pesado que complica el ritmo de la historia
All Of Us Strangers, la nueva película del director británico Andrew Haigh, alterna entre estas dos líneas paralelas creando un contraste que en un inicio es intrigante. Pasado y presente, realidad e imaginación (podemos concluir rápidamente que la presencia de los padres puede no ser del todo real, porque los personajes de Bell y Foy parecen de la misma edad que su hijo). La razón no es explícita. Las explicaciones no son necesarias porque las emociones son reales.
El concepto tiene fuerte potencial emocional. No nos queda duda que el duelo de Adam es genuino, que verdaderamente está atormentado por la muerte de sus padres, aun después de todos estos años. Pero desde sus primeras interacciones con ellos, podemos notar lo que él seguro se pregunta. ¿De verdad habrían aceptado, siendo ellos de una generación anterior, tener un hijo gay? ¿Vemos lo que Adam piensa que habría pasado? ¿O lo que le gustaría que pasaría?
All Of Us Strangers tiene momentos emotivos y acertados toques de humor. Las escenas de Adam y Harry muestran química y sensualidad. Los actores están muy bien, sobre todo Claire Foy, que con una mirada tan triste y melancólica te transmite su deseo de vida.
La cámara captura la tierna torpeza de Adam con simples, fluidos, movimientos que destacan la electricidad de las caricias. Pero la película no logra volverse un todo coherente, en parte porque Haigh le impone un tono pesado y sombrío que mata la espontaneidad y el realismo. Y las relaciones de Adam, con Harry y con sus padres, se pierden en generalidades sobre la familia y el romance. Pinta en líneas demasiado gruesas, busca atajos a la comprensión del público, en lugar de encontrar algo único y específico.